CHURROS, SOL Y PLAYA.

    Todo monitor deportivo sabe que las cosas que gustan se tiene que repetir periódicamente. Bajo ese prisma, hemos vuelto a plantear actividades como esta que tuvieron muy buena aceptación. El viaje comenzó con el clásico estrés que supone sacar los billetes del tren para 21 personas con una cola de personas esperando a que tu termines.
    Como siempre, cuando llegamos a Málaga nos fuimos a desayunar churros con chocolate antes de emprender una caminata de unos 30 minutos hacia la playa de la misericordia.
    Una vez allí, en la playa, estuvimos realizando unos ejercicios de estiramientos además de  ejercicios de respiración y relajación. La siguiente actividad consistía en un paseo por la orilla remojándose los pies.
     Tras mejorar nuestro riego sanguíneo en las piernas volvimos a la estación del tren, no sin antes pararnos a medio camino a tomar un refrigerio en un bar.
     La siguiente actividad de este tipo hemos convenido en hacer un paseo por el muelle 1.